Colegio San Esteban de Roma

Ubicado a los pies del Aventino, la más exclusiva de las siete colinas de Roma, y a un tiro de piedra de los grandes sitios imperiales de la ciudad, nuestro colegio secundario internacional, sin fines de lucro y no confesional para estudiantes internos y externos ha construido su programa académico y reputación sobre la herencia clásica de nuestro país anfitrión, Italia, y el rigor de dos prestigiosos modelos educativos: el currículo estadounidense, independiente, de preparación para la universidad y el Diploma de Bachillerato Internacional. La Familia St. Stephen y nuestros valores

Con trescientos estudiantes, somos un grupo pequeño; cincuenta y ocho internos conforman nuestra familia nuclear. La dimensión experiencial de nuestro currículo, que incluye un extenso programa de viajes, confiere un toque práctico a nuestra formación académica, y nuestra ubicación, en el corazón de la Ciudad Eterna y en la encrucijada de Europa, ofrece un rico contexto cultural para aprender y crecer. El profesorado de St. Stephen's está formado por académicos, artistas, escritores y científicos apasionados por sus disciplinas que iluminan las mentes y las vidas de los alumnos a los que enseñan día a día. Nuestros estudiantes provienen de todo el mundo para cursar su educación secundaria en un ambiente de esfuerzo académico, exploración creativa e intercambio multicultural. El lema de los fundadores de la escuela en 1964 expresa la dedicación a la excelencia académica que comparten tanto estudiantes como profesorado:

• Mens (mente): la capacidad de pensar de forma crítica, creativa y científica, junto con una buena dosis de curiosidad natural;
• Voluntas (voluntad): la motivación para tener éxito y el potencial para sobresalir académicamente;
• Gratia (influencia): interpretada como integridad personal y social, cooperación y preocupación por los demás y compromiso con la comunidad, tanto local como global.

Los pilares de la excelencia académica

Somos un colegio internacional de habla inglesa en el corazón de Roma. Nuestro pequeño tamaño y estimulante entorno colaborativo ofrecen a los estudiantes una experiencia transformadora de preparación universitaria, basada en los más altos estándares de excelencia académica. St. Stephen's es un colegio de cuatro años, sin fines de lucro, independiente, aconfesional, con régimen de internado y diurno, que aprovecha las fortalezas de las tradiciones educativas estadounidenses y europeas para brindar a nuestros estudiantes una comprensión más profunda del mundo, basada en la cultura occidental.

A través de una mentoría cercana, la indagación intelectual y una enseñanza inspiradora en clases reducidas, motivamos a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial y a asumir la responsabilidad de su rendimiento académico, preparándolos para las universidades más competitivas de ambos lados del Atlántico y para disfrutar de las ventajas del aprendizaje continuo. Fomentamos un ambiente cálido y colaborativo, enriquecido por un dinámico programa de internado, para que los jóvenes adquieran la confianza necesaria para encontrar su verdadero equilibrio y participar plenamente como ciudadanos responsables en una comunidad internacional diversa. Examinamos la rica historia de Roma como fuente de inspiración académica y animamos a los estudiantes a integrarse en su dinámico entorno urbano. Nos esforzamos por ofrecer una experiencia preparatoria integral que siente las bases para un rendimiento académico continuo y una vida plena.

En 1964, la Escuela St. Stephen se fundó en Connecticut como una corporación sin fines de lucro y exenta de impuestos, impulsada únicamente por un sueño audaz. Los cuatro fundadores, liderados por el Dr. John O. Patterson, director durante trece años de la Escuela Kent de Connecticut, no tenían nada tangible que ofrecer a la nueva corporación. En cambio, aportaron su sueño y una experiencia combinada de más de cien años en educación secundaria. Entre los fundadores se encontraban dos antiguos colaboradores del Dr. Patterson en Kent: Raydon Ronshaugen, ex subdirector y director de currículo de la Escuela Kent; Robert E.K. Rourke, brillante profesor y autor, referente en la educación matemática en la escuela secundaria estadounidense; y F.D.L. Stewart, quien contaba con una amplia experiencia docente y administrativa como colega de E.K. Rourke en Pickering College, Ontario. Juntos, centraron su experiencia en el desarrollo de un sólido programa de instrucción para cumplir con los requisitos de ingreso a las mejores universidades estadounidenses.

La Escuela, coincidieron, “debe ser más que una escuela más; debe ser pionera en la educación estadounidense en el extranjero, cuya única excusa para existir es la excelencia”.

La escuela atrajo a veintiséis profesores de prestigiosas escuelas preparatorias estadounidenses como Choate Rosemary Hall, Philips Andover, Kent, Eaglebrook y Gillman. A ellos se unieron profesores de Italia, Francia, Noruega y otros países; todos unidos en su dedicación por hacer realidad esta visión académica pionera. Juntos, acogieron a un alumnado diverso de ciento cincuenta estudiantes, la mitad de los cuales eran internos provenientes de diversos rincones del mundo, desde Adís Abeba hasta Medford, Oregón.

La Escuela de San Esteban ofrecía un currículo de primera clase con los mejores elementos de una educación clásica en artes liberales, incluyendo dos años de latín o griego. Sus fundadores eligieron Roma porque creían que la ciudad era «el símbolo y depositario de los perdurables valores éticos, culturales y religiosos de Occidente» y «una de las encrucijadas internacionales más cosmopolitas del mundo moderno».

En 1975, St. Stephen's se convirtió en el primer colegio de Italia en ofrecer el programa de Bachillerato Internacional (BI). Dos años después, celebró a sus dos primeros graduados del Diploma del BI. Siendo uno de los primeros colegios de Europa en adoptar el Bachillerato Internacional, el programa del BI del colegio produce excelentes resultados, con una puntuación media de 35 puntos en el diploma.

A lo largo de su historia, el Colegio San Esteban se ha ganado una merecida reputación por su rigor académico, tanto en Roma como en el extranjero. Tras dos mudanzas, el colegio ahora reside en una espaciosa villa que antiguamente fue un convento, enclavada en el corazón del centro histórico de Roma, muy cerca de maravillas culturales como el Coliseo, el Circo Máximo y el Foro Romano.

Si bien ha experimentado un rápido crecimiento durante las últimas dos décadas, la escuela ha mantenido su compromiso de colaborar con las comunidades locales e internacionales de Roma y de brindar apoyo a los ciudadanos estadounidenses que viven en el extranjero. El sueño original de los fundadores de establecer una escuela impulsada por la búsqueda de la excelencia, el desarrollo integral de los miembros de su comunidad y el mantenimiento de los más altos estándares en todos los aspectos sigue vigente.

Con el incomparable patrimonio histórico y artístico de Roma como telón de fondo, el Colegio San Esteban adopta una perspectiva global, un compromiso de servicio y una dedicación a la promoción de la ciudadanía mundial. Es un testimonio de las aspiraciones visionarias de sus fundadores y se mantiene firmemente arraigado en su tradición de excelencia académica.