Tras analizar la estructura del currículo británico, es importante comprender cómo este sistema puede beneficiar a su hijo. Cada sistema educativo ofrece beneficios únicos a los alumnos, según los objetivos explícitos e implícitos del marco educativo.
Veamos los principales beneficios de estudiar el currículo británico:
Un sistema reconocido mundialmente
El currículo británico, establecido en 1988, es uno de los sistemas educativos más impartidos del mundo. La educación está centrada en el estudiante y es equilibrada, ofreciendo amplitud y profundidad en los contenidos. Los estudiantes son evaluados mediante pruebas comparativas periódicas, lo que garantiza que dominen el contenido y estén preparados para el Certificado General Internacional de Educación Secundaria (IGCSE). Un nivel calificaciones.
Un enfoque tanto en la amplitud como en la profundidad
El currículo británico estructura el aprendizaje de forma que guía a los estudiantes a través de diversas asignaturas, incluyendo no solo las fundamentales como matemáticas, ciencias y literatura, sino también artes, humanidades y otras. Desde los primeros años, los estudiantes se centran en los fundamentos de sus asignaturas y, a medida que progresan, el currículo profundiza en ellas, explorando no solo sus aspectos más complejos y matizados, sino también su relación con otras áreas de estudio.
Las etapas clave bien definidas proporcionan una comprensión clara del progreso
A diferencia del currículo estadounidense, que no define explícitamente las etapas de la educación, el sistema británico está organizado en bloques bien definidos conocidos como "Key Stages" (Etapas Clave). La primera etapa es Early Years para estudiantes de 2 a 5 años. Una vez que el estudiante ingresa al nivel primario, comienza con Key Stage 1 (KS1), de los 5 a los 7 años, antes de pasar a KS2, que dura de los 7 a los 11 años. Después de completar las Key Stages de primaria, los estudiantes comienzan las etapas de secundaria con KS3 y KS4, que son para las edades de 11 a 14 y de 14 a 16 años, respectivamente. Los estudiantes que planean continuar en la universidad pueden comenzar entonces el KS5 preuniversitario, donde estudiarán de los 16 a los 18 años. Dado que las etapas están explícitamente definidas y los estudiantes son evaluados al final de cada Key Stage, las etapas brindan una visión general simple y clara del progreso que ha logrado un estudiante.
Las escuelas fomentan el crecimiento más allá del aula
Como currículo que busca formar personas integrales que no solo comprendan los principios fundamentales de sus asignaturas, sino que también sepan aplicar estos conocimientos en situaciones reales, el Currículo Británico prioriza las actividades extracurriculares, como los deportes de equipo y las artes escénicas, que ayudan a los estudiantes a desarrollar habilidades de liderazgo y trabajo en equipo, así como a comprender las complejidades de la competencia y la camaradería. Los colegios que siguen el Currículo Británico también animan a los estudiantes a participar en actividades que profundizan su comprensión de las asignaturas académicas, como los Modelos de Naciones Unidas, los Debates o las actividades STEM, como las competiciones de robótica o matemáticas.