La escuela puede ser estresante o emocionante según tu preparación. No esperes a tener problemas. Ya sea que tengas dificultades académicas o sociales, es importante saber cómo abordarlas mejor. Tener un plan desde el principio es una excelente manera de establecer un tono positivo para todo el año escolar.
No tengas miedo de hacer preguntas
El conocimiento es poder. Nunca tengas miedo de preguntar en clase. Puede que no te parezca bien, pero si no estás seguro de algo, lo más probable es que alguien más tenga la misma pregunta. Si no preguntas, podrías terminar haciendo mal todo un proyecto. No te arriesgues a obtener una calificación baja por los nervios. Si necesitas que te aclaren algo, dilo.
Aprenda dónde estudia mejor
Cada persona tiene su propio estilo de aprendizaje. Algunas personas necesitan escuchar música mientras estudian y otras necesitan silencio absoluto. Si sabes que absorbes mejor la información sentado en el parque, proponte estudiar allí siempre que puedas. Descubre qué hábitos de estudio te funcionan y úsalos siempre que puedas.
Alguna música podría ayudar a concentrarse mejor:
Participe en actividades extracurriculares
Participar en deportes y clubes puede parecer una distracción innecesaria, pero es todo lo contrario. Cuanto más conectado estés con tu escuela, más disfrutarás de tu tiempo allí. Tu cerebro necesita un descanso de vez en cuando. El estrés dificulta el aprendizaje, así que divertirte y mantenerte activo te ayudará a aprender con mayor eficacia.
No te atrases con las tareas
Puede ser muy tentador saltarse una tarea de vez en cuando. Una tarea puede no parecer gran cosa en general, pero puede llevar a saltarse más en el futuro. No te permitas empezar el año con desventaja. Asegúrate de completar todas tus tareas a tiempo, especialmente a principios de año.
No te compares con tus compañeros de clase
Compararse con los demás es contraproducente. Es fácil encontrar defectos en uno mismo. Intenta centrarte en tus cualidades positivas y esfuérzate al máximo. Hay quienes sacan sobresalientes sin esforzarse mucho, mientras que otros tienen que esforzarse para obtener calificaciones promedio. Mientras te esfuerces al máximo, es suficiente.